A medida que los bancos internacionales y las empresas de inversión siguen ampliando sus operaciones en Irlanda, el país se ha convertido en un actor importante del sector financiero mundial. Según un reciente informe de la Federación de Bancos Internacionales de Irlanda (FIBI) y la Federación de Banca y Pagos de Irlanda (BPFI), 17 de los 20 principales bancos mundiales han establecido su presencia en el país.
El ascenso de Irlanda como centro financiero mundial
La FIBI es el órgano representativo de la banca internacional y las empresas de inversión en Irlanda, y representa a más de 30 organizaciones, entre ellas destacados bancos como Bank of America, Wells Fargo y JP Morgan. Los datos de comercio y desarrollo de las Naciones Unidas revelan que Irlanda es actualmente el sexto exportador mundial de servicios financieros, con el decimonoveno sector bancario internacional.
El informe destaca la contribución sustancial de los bancos internacionales al empleo en Irlanda. A finales del año pasado, las empresas miembros de la FIBI empleaban a más de 14.200 personas, lo que supone un aumento del 16% en comparación con 2019. Se espera que esta cifra aumente, ya que el 65% de las empresas tiene previsto aumentar su plantilla este año.
Factores que atraen la inversión a Irlanda
Gavin Purtill, Director de Regulación y Supervisión de la Federación de Banca y Pagos de Irlanda, señaló que varios factores contribuyen a que estas empresas decidan instalarse en Irlanda. Aunque el tipo del impuesto de sociedades es un aspecto, el acceso a trabajadores con talento y eficientes sigue siendo la fuerza motriz de su decisión.
Purtill también expresó su confianza en que los cambios en el tipo del impuesto de sociedades irlandés no afecten negativamente al atractivo del país para estas empresas, citando que la estabilidad del impuesto de sociedades ha sido históricamente una ventaja. Mencionó además que la carga regulatoria es uno de los retos a los que se enfrentan los bancos, haciendo hincapié en la necesidad de igualdad de condiciones en comparación con otros países.
Fernando Vicario, Presidente de la FIBI y Consejero Delegado de Bank of America Europe DAC y Country Executive para Irlanda, atribuyó el crecimiento del sector a la salida del Reino Unido de la UE y al entorno operativo favorable a las empresas en Irlanda. Este crecimiento ha facilitado el desarrollo de competencias especializadas entre la mano de obra local, mejorando la reserva de talento del sector y la competitividad del país para futuras inversiones y crecimiento.
Una encuesta realizada a principios de este año entre los miembros de la FIBI reveló optimismo de cara al futuro a pesar de las tensiones geopolíticas y la incertidumbre macroeconómica. El 80% de los encuestados espera que la actividad comercial de sus operaciones en Irlanda aumente, mientras que el 15% cree que se mantendrá sin cambios, y sólo el 5% anticipa un descenso.
Brian Hayes, Consejero Delegado de Banking and Payments Federation Ireland, citó varias ventajas que Irlanda ofrece a los bancos y empresas de inversión internacionales, entre ellas su condición de único país de habla inglesa con tradición de common law en la zona del euro, una cultura favorable a los negocios y normas reguladoras reconocidas internacionalmente. Además, la estabilidad económica y política de Irlanda, en particular su respuesta a la crisis financiera mundial, sigue atrayendo al sector financiero
Retos del sector financiero irlandés
Sin embargo, el informe advierte de que el crecimiento continuado del sector bancario y de inversión internacional de Irlanda no debe darse por sentado. Deben abordarse retos como el creciente panorama normativo a escala nacional y de la UE, las incertidumbres geopolíticas, el aumento de los costes empresariales y los riesgos cibernéticos. Para garantizar el éxito del sector a largo plazo, los miembros de la FIBI y el gobierno deben trabajar juntos para crear condiciones equitativas en todos los aspectos del entorno operativo.
Al hacerlo, Irlanda puede consolidar su posición como un centro atractivo e innovador para áreas emergentes como las finanzas sostenibles y fintech, mantener el desarrollo de una base de habilidades diversas y preservar la estabilidad económica y política que ha beneficiado al país durante años.